Declaración FIPU
abril 2016

Las madres cuentan que los paramilitares aparecían siempre a las tres de la tarde en el colegio o en sus hogares, se sentaban y se llevaban a las hijas: “Y al otro día como a las cinco de la mañana me la trajeron”.

Por: Noticias Uno
Colombia

Lucila Inés Gutiérrez, exrectora del único colegio de la vereda Riachuelo del municipio de Charalá en Santander, tendrá que responderle a la justicia por qué los paramilitares del bloque Central Bolívar, que dominaban la región, violaron a 214 niñas y niños que estudiaban en la escuela entre 2000 y 2004. Gutiérrezes acusada por la Fiscalía por la complicidad con los jefes paramilitarespara ofrecerles los servicios sexuales de sus alumnas.

El ente investigador tiene 25 testimonios, entre madres de familia y niñas que fueron forzadas a sostener relaciones con comandantes paramilitares que, a su vez, tenían vínculos con el concejal Luis Moreno, esposo de la señora Gutiérrez, quien también es investigado por vínculos de vieja data con los paramilitares. Dichos testimonios fueron revelados por Noticias Uno en 2014 y 2015.

El esposo de la exrectora dijo en una audiencia, en defensa de los paramilitares, que no violaban niñas sino que éstas abusaban de ellos.

En el expediente también aparece la organización de un reinado que le organizaron a los paramilitares con las niñas del colegio de Riachuelo a cargo de Gutiérrez.


Las madres cuentan que los paramilitares aparecían siempre a las tres de la tarde en el colegio o en sus hogares, se sentaban y se llevaban a las hijas: “Y al otro día como a las cinco de la mañana me la trajeron”.

Cuando los menores de edad se negaban a relacionarse con los paramilitares, tenían establecido un castigo. Dieciséis años después a penas la justicia empieza a encontrar responsabilidad penal de esta pareja.

En comunicación telefónica con la FIPU, desde Colombia, representantes de la organización indígena Orewa del Chocó denuncian que desde hace aproximadamente dos meses “se presentan combates” entre la guerrilla y grupos paramilitares en la cuenca del río Salaquí del municipio de Riosucio (Chocó), donde habitan comunidades indígenas y afrodescendientes.

“Tememos por un desplazamiento masivo de las comunidades que quedan en medio de del fuego cruzado”, afirmó Helfer Andrade de Orewa, quien además aseguró que hasta la fecha los organismos del Estado que velan por los Derechos Humanos no han tomado medidas.

Orewa también denunció que el día de ayer, 21 de abril, obtuvieron información sobre la presencia de cerca de 300 paramilitaresque llegaron a la comunidad indígena de Isleta y que mantienen a la población atemorizada.

Si hay tantos controles de la Fuerza Pública para la población civil, ¿qué pasa con estos controles para estos grupos?”, expresó con preocupación Andrade.

Por estos hechos, de manera urgente la organización indígena Orewa llama a la solidaridad de las organizaciones de Derechos Humanos para que exijan al Estado las medidas de protección para las comunidades indígenas, afrodescendientes y campesinas que habitan en el municipio de Riosucio, así como el acompañamiento de los organismos internacionales para salvaguardar la vida de la población. 

FIPU PRESS | Foto: Archivo

Este martes, en su portal web, las FARC saludaron a la Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad (REDH), que en días pasados manifestó su preocupación por la amenaza paramilitar y la paz de Colombia.

“Hemos conocido la declaración de su reciente XII Encuentro realizado en Caracas este mes, donde señalan su preocupación por el fenómeno del paramilitarismo que amenaza en su expansión no solo los importantes avances de los diálogos en Colombia, sino la misma paz de toda Nuestra América”, manifestó la insurgencia.

Para la organización guerrillera, el trabajo de la REDH es de suma importancia en el escenario de “un mundo amenazado por la crisis civilizatoria del capitalismo, pero esperanzado por los sueños y resistencias de los pueblos”; consideran, además, que la labor de la REDH “ha sido crucial para alimentar la teoría, las ideas, la creación y la acción por una nueva sociedad”.

Las FARC también manifiestan su voluntad de continuar la lucha política después de dejar las armas, “para darle continuidad a nuestra lucha por el socialismo y la Patria Grande de forma incruenta”, afirma la organización guerrillera que finaliza invitando a un intercambio de ideas:

“Queremos invitarlos a iniciar un intercambio con la Delegación de Paz de las FARC-EP, en aras de aunar esfuerzos en defensa de la humanidad, en contra de la muerte y del capital, aspirando contar con sus opiniones y aportes en la conquista de la salida política en Colombia, y en la continuidad de nuestra lucha por la Patria Grande y el Socialismo, firmes en nuestra convicción que si la cultura y las ideas han fungido como uno de los principales instrumentos de opresión, también han de ser arma potente para la emancipación humana”.

FIPU PRESS


A continuación el texto íntegro de las FARC para la REDH:

Compañeras y compañeros

Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos Sociales en Defensa de la Humanidad (REDH)

Cordial y bolivariano saludo:

En medio de un mundo amenazado por la crisis civilizatoria del capitalismo, pero esperanzado por los sueños y resistencias de los pueblos, consideramos que su importante labor durante más de una década como Red de Intelectuales, Artistas y Movimientos sociales por la Defensa de la Humanidad, REDH, ha sido crucial para alimentar la teoría, las ideas, la creación y la acción por una nueva sociedad, proyecto en el que confluimos y esperamos aportar también la insurgencia colombiana. De entrada compartimos sus banderas contra toda forma de dominación, apoyo a los procesos de cambio social, denuncia al imperialismo, sus políticas neoliberales, y sus guerras, combate al hambre y la miseria, y a favor de la diversidad cultural, la defensa del medio ambiente y de desarrollar un pensamiento alternativo con una cosmovisión propia.

Desde su surgimiento, las FARC-EP han estado inspiradas por la ideología revolucionaria, enriquecida por la tradición de las luchas de Nuestra América, en franco diálogo con los debates recreadores del pensamiento crítico y con la aspiración de construir una nueva cultura, en las múltiples dimensiones de creación de nuestros combatientes. En este momento histórico, cuando se discute la posibilidad de hacer nuestro tránsito hacia movimiento político legal en el marco de la apertura democrática que exigen los acuerdos de paz, estamos convencidos que este paso solo será posible, a través del fortalecimiento de nuestros ideales de emancipación, la profundización del análisis y la teoría revolucionaria, y la expansión vigorosa de nuestro proyecto cultural liberador.

Hemos conocido la Declaración de su reciente XII Encuentro realizado en Caracas este mes, donde señalan su preocupación por el fenómeno del paramilitarismo que amenaza en su expansión no solo los importantes avances de los diálogos en Colombia, sino la misma paz de toda Nuestra América. También saludamos que hayan suscrito el llamamiento “Colombia: Son horas de paz”, expresando la importancia cardinal y el gran interés que en la actual coyuntura latinoamericana suscita la posibilidad cierta de la conquista de la solución política para el largo conflicto social armado en nuestro país. Son de gran valía sus manifestaciones en pos del fin de la guerra y de la reconciliación de los colombianos y colombianas, porque estamos convencidos que la cultura y las ideas nuevas que ustedes enarbolan, serán pilares para la construcción de la paz.

Hablamos de una solución política, para darle continuidad a nuestra lucha por el socialismo y la Patria Grande de forma incruenta, no como una contemporización con los enemigos de la humanidad, para que sigan desarrollando su modelo de saqueo y violento despojo. En la mesa de La Habana, se han construido conceptos y propuestas revolucionarias para la Reforma Rural Integral, la Participación Política, la Solución al problema de drogas ilícitas, las Víctimas, la Justicia para la Paz, y en la actualidad avanzamos en la creación de alternativas para el Fin del Conflicto. Creemos que desde la batalla de ideas que ustedes desarrollan, tenemos muchos aspectos para intercambiar y compartir, seguros que la solidaridad mundial, así como el pensamiento y artes que impulsan la REDH, serían un gran aporte para la paz de Colombia, y para ratificar a Nuestra América como una Zona de Paz, tal cual lo ha propuesto recientemente la CELAC.

Queremos invitarlos a iniciar un intercambio con la Delegación de Paz de las FARC-EP, en aras de aunar esfuerzos en defensa de la humanidad, en contra de la muerte y del capital, aspirando contar con sus opiniones y aportes en la conquista de la salida política en Colombia, y en la continuidad de nuestra lucha por la Patria Grande y el Socialismo, firmes en nuestra convicción que  si la cultura y las ideas han fungido como uno de los principales instrumentos de opresión, también han de ser arma potente para la emancipación humana.

Esperando poder encontrarnos prontamente,

Delegación de paz de las FARC-EP

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